Logo Carla Acebey de Sánchez

ARTÍCULOS

La pareja y la fidelidad

No puedes ser más fiel a tu pareja que a ti

Todos queremos estar en una relación y anhelamos ese amor de pareja. Y es que vivir en amor es maravilloso, pero a veces, el costo a pagar por esa relación es demasiado alto. Ocurre cuando te traicionas a ti para complacer al otro. Este tema es muy interesante, así que sigue leyendo.

Una historia en la que puedes verte reflejada(o).

Tengo una querida cliente que se está separando de su pareja. Han estado juntos por más de 20 años y aún le ama. Sin embargo, supone que las cosas no van a cambiar y ya no puede seguir traicionándose para complacer a su pareja.

Su compañero es celoso. Y a pesar de que es una relación larga, siempre cree que ella está interesada en otras personas, que coquetea con otros. Por su parte, esta mujer ha cedido en muchas cosas para evitar conflictos. Es una persona cordial, que le gusta conversar con la gente. Sin embargo, durante años ha dejado de hablar con determinadas personas, de salir con otros, ni siquiera en cosas relacionadas con su trabajo. Pero no ha sido suficiente. Su pareja desconfía y lo hará hasta del conserje de su edificio. Para él, que ella sea cordial significa un riesgo porque puede llevar a otra cosa. Para ella, es la forma natural de relacionarse con la gente.

Cuando me conversaba sobre su situación, le decía que la sensación de quien vive una relación así, es que siempre está caminando sobre huevos, con el temor de romperlos. Bajo estas circunstancias, no te puedes relajar y ser tú. Más bien, siempre tienes que estar conteniéndote, reprimiéndote, con el temor de que alguna cosa que hagas provocará los celos de tu pareja y los conflictos posteriores.

Si estás viviendo esto reflexiona. Si bien cada quien hace lo mejor que puede, desde su historia y nivel de consciencia, hay situaciones que obligan a cambiar. De hecho, aquí te dejo el enlace a un cortometraje que muestra un caso patológico.

¿A quién eres fiel en tu relación de pareja?

Como decía al principio, es rico vivir en pareja, sentir amor y ser amado. Sin embargo, cuando esto significa que no puedes ser tú, hay varias consideraciones que hacer.

La más importante es, que a la primera persona a la que tienes que ser fiel es a ti. Es contigo con quien siempre iras a la cama a dormir y te despertarás al día siguiente. Por tanto, tienes que ser leal a tu corazón, no puedes traicionarte.  Evidentemente, una relación de pareja requiere negociación y acuerdos, porque ambos deben sentirse felices. Pero esto tiene un límite, porque cuando uno de ellos debe sacrificarse o dejar de ser la persona que quiere ser para complacer al otro y evitar conflictos, esa relación no es sana.

En mi experiencia, el gran regalo de una relación es que puedo mostrarme como realmente soy, con mis luces y mis sombras y saber que igual mi pareja o la otra persona de la relación me aceptará como soy.

Pero volviendo a la experiencia de mi cliente, si algo que a ella le resulta natural y esta bien para ella, le hace sentir bien, no puede ser expresado, es estar en una especie de cárcel.

Seguro que en la relación que tiene esta mujer hay buenos momentos y disfrute. Ese es el contrapeso, además del amor que pueden sentir el uno por el otro. Sin embargo llega un momento donde a tu alma le pesa demasiado esa forma de relacionarse donde no eres tú. Indudablemente ahora está en ese proceso de duelo y se enfrenta al miedo del porvenir. Admiro a mi cliente porque sé que se requiere de valentía salir de algo que es medio bueno por amor a ti.

Terminar una relación que no te hace bien no es un fracaso.

Una de las cosas que ella me comentaba es que sentía que por más que lo había intentado en la relación esta fracasando. Yo le digo que lo veo completamente distinto, su proceso ha sido de empoderamiento y eso la ha llevado a decir: ya no puedo estar con alguien con quien no puedo ser yo. Concluir con una relación de pareja (aunque haya sido larga) como resultado del amor por ti y el llamado de tu alma, no es una pérdida, es un gran aprendizaje.

Sin embargo mucha gente no lo ve así. Socialmente, hay muchos condicionamientos de los que debemos deshacernos en ese camino de ser fieles a nosotros. ¿Cómo calificar que una ruptura es un fracaso si te lleva a un mayor bienestar?. Obviamente, hay dolor por perder a quien amas, da temor sentirse sólo. Sin embargo, lo que recuperas es tan valioso, que creo que bien vale correr el riesgo y tomar la decisión de la ruptura.

Una última reflexión.

Si vives o has vivido una situación similar, quiero decirte: ¡Tú puedes! ¡Tú mereces!. Por favor no te conformes con una relación más o menos buena. No te quedes con una pareja que te daña. Eres más fuerte de lo que crees y esa idea de necesitar al otro para ser feliz, es un error. Con el tiempo te darás cuenta que serás mucho más feliz siendo quien quieres ser. Y además hay alguien te que ama exactamente como eres, porque es el reflejo de esa relación de amor que has construido con la persona más importante de tu vida: Tú.

Enseñanzas de vida para nuestros hijos.

¡Tú si puedes!

En las relaciones sanas no hay apegos

Autor: Carla Acebey de Sánchez

Mujer, esposa, madre y empresaria. Renacedora profesional, certificada para liderar seminarios del Proyecto Internacional de Autoestima y coach de autoestima, actualmente ejerce como consultora organizacional y facilitadora en talleres, seminarios a grupos y sesiones individuales.